Cómo hacer uso del irrigador dental
Los irrigadores dentales son de muy fácil uso, por ello y debido a esta sencillez son de cómoda incorporación a nuestra higiene bucal diaria.
El irrigador dental o bucal puede utilizarse con agua o con enjuague bucal, este puede esta sólo o diluido en agua, por otro lado también decir que la irrigación dental complementa al cepillado de dientes, por lo que debemos tener los dientes cepillados antes de comenzar con el irrigador dental, una vez dicho esto decir que:
- Primeramente se ha de rellenar el recipiente para el agua, bien con agua o bien con enjuague bucal hasta que lo tengamos totalmente lleno.
- Luego regularemos la presión del agua según nuestra sensibilidad y nuestras necesidades (se tendrá en cuenta si tenemos alguna inflamación o infección en las encías para no hacernos daño).
- Seguidamente, se coloca la boquilla o cánula e introducimos el irrigador dental en la boca, sobre las encías.
- Una vez tengamos el irrigador dental sobre las encías lo encenderemos, para posteriormente dirigir el chorro a presión de agua entre los dientes (se lleva a cabo la limpieza interdental) y a lo largo de las encías. Esto lo haremos por todos los intersticios y recorriendo tanto la mandíbula superior como inferior; dejaremos la boquilla unos segundos en cada diente. La recomendación es hacer el mismo recorrido para no olvidar ningún diente.
- Una vez finalizada la limpieza bucal lavaremos el depósito del irrigador dental y lo secamos junto a la boquilla o cánula.
Muchos irrigadores dentales ya se venden con diferentes boquillas, estas varían la expulsión del líquido para adaptarse a cada boca y sus diferentes necesidades, así por ejemplo, hay boquillas con cabezal ortodóncico (especialmente diseñado para la limpieza de ortodoncias), boquillas linguales (para limpiar la lengua), boquillas para superficies dentales, etc.
Siguiendo los pasos anteriormente descritos e incorporándolos a nuestra rutina de higiene bucodental, obtendremos unos resultados visibles a corto plazo que mejoraran nuestra imagen.